¡Ha llegado esa época del año! Hace un poco de frío (o algo así), están saliendo las decoraciones de Halloween (¿a alguien más le parece que la entrada de la casa parece un huerto de calabazas?) y hay que encargar pronto esas tarjetas navideñas que tanto le gusta recibir a tu tía. Y eso significa que hay que arreglar a la familia para la temida sesión de retratos familiares de las fiestas. ¡Pero estamos aquí para decirte que no tiene por qué ser espantosa! ¡Solo sigue los consejos y trucos de Ever para que sea la sesión de retratos más fluida de todas!
Paso uno: déjalo ir. Sí. Pon a todo volumen “Let it Go!!!” o la canción favorita del momento de tus hijos, ya sabes, esa que has escuchado un millón de veces. La que hace sonreír a tus hijos y los relaja. Baila, relájate y prepárate para divertirte.
Segundo paso: sírvete tu bebida favorita, ya sea una sabrosa cerveza, una copa de vino, matcha o un buen refresco tradicional. Tómate un minuto. Respira profundamente unas cuantas veces y deja atrás el resto del día.
Paso tres: deja que los niños sean niños. Cuanto más intentes controlarlos, más se rebelarán. Si tienes un buen fotógrafo, debería ser capaz de capturar los momentos intermedios, las risas, el caos de forma hermosa, en lugar de intentar controlarlo.
Paso cuatro: Si todo esto suena bien, ¡tienes suerte! En Ever Photos, nuestro equipo de dos personas se encargará de todo. Nos aseguraremos de que tu música favorita suene a todo volumen, que tu cabello luzca bien y, mientras entretenemos a tus hijos, tú puedes relajarte y obtener hermosas imágenes que atesorarás para siempre.
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